Tal vez recuerden la película El golpe ysu banda sonora, basada en composiciones de Scott Joplin. El rag The Entertainer, aunque para mi gusto no es de los más inspirados, he de reconocer que, transcrito para banda, contagia por su alegría arrolladora. Es el que ha quedado como tema principal de la película.
Scott Joplin nació en en Texarkana en 1868, una pequeña ciudad dividida entre los estados de Texas y Arkansas. Su padre fue jornalero y conoció la esclavitud hasta que fue abolida, cinco años antes del nacimiento de Joplin. Los Joplin llevaban una intensa vida musical en el hogar. Scott tocaba la guitarra y conocía la corneta. A los siete años descubrió un piano en casa de un vecino y se puso a experimentar de inmediato. Antes de cumplir once años, improvisaba tan bien que pasó a ser el motivo de conversación de la comunidad de color, cuyos rumores llegaron a la comunidad blanca a través del personal de servicio.
En aquellos días, casi cada ciudad del Medio Oeste tenía su profesor de música alemán. Había uno en Texarkana que oyó a Joplin y se ofreció para impartirle lecciones de piano gratuitas junto con algunos principios de armonía. La viuda de Joplin explicaría que su esposo nunca olvidó a su benefactor y que en sus últimos años de vida enviaba dinero a su antiguo profesor, por entonces enfermo y pobre, y también lo visitaba.
El padre insistía en que Joplin aprendiera un oficio, por lo que a los 14 años abandonó la casa paterna. El traslado le llevó a los red-light (lupanares) y a los honky-tonk (tabernas), donde había una gran demanda de pianistas. Se lanzó desde Texas a Louisiana y a Mississippi, Missouri, Arkansas y Kansas –la cuna del ragtime-. Una órbita algo lóbrega pero vital: Este “conservatorio” popular, le fue mucho más valioso que un liceo; músicos blancos y negros se encontraban a un mismo nivel, compitiendo, viajando y compartiendo las tradiciones musicales de ambas razas.
Y así cristalizó el ragtime: Un ostinato básico y una melodía libre de recorrido, con anticipaciones y retardos, deambulando entre tiempos y compases; un drama de tensiones entre una base rítmica de afirmación y una métrica melódica que la niega. En 1885 Joplin hizo de St. Louis el centro estable de su vida itinerante; su centro de operaciones era el saloon Turpin´s Silver Dollar, un club en donde se reunían jóvenes pianistas que competían por dinero y alguno obtenía trabajo. En 1893 se inauguró la Feria mundial de Chicago y toda la fraternidad del ragtime se encontró allí. Joplin formó una pequeña orquesta en la que tocaba el piano y la corneta, consiguiendo un empleo estable, y más tarde un cuarteto con el que recorrerá Louisiana y Texas.
En Temple, Texas, en 1896, Joplin asegura sus primeras publicaciones, entre ellas The Great Crush Collision March. Esta marcha es un curioso ejemplo de música descriptiva sobre un accidente; en la partitura puede leerse: el estrépito de los trenes, silbando en el cruce y el choque. En 1897 concluyó su más famosa partitura, Maple Leaf Rag, que fue publicada por John Stark. Este editor, había pasado de granjero a negociante de helados, luego transportaba con los helados armonios para vender, los cuales le facilitaron la entrada en el mundo de los negocios musicales, siendo el foco de la vida musical en Sedalia. Maple Leaf Rag se agotó en Sedalia, se recibieron pedidos de toda la región y finalmente de todo Estados Unidos. La partitura triunfó en América, en donde todavía se edita y goza de popularidad. Este suceso financió el traslado de Stark, Joplin y su esposa Belle Hayden a St. Louis y ayudó a costear la instalación de una impresora, en lugar de la imprenta manual que utilizaban.
Joplin, gracias a los ingresos por los derechos de Maple Leaf, abandonó las actividades más pesadas del submundo, dedicándose a enseñar y a componer. Además, su esposa convirtió su hogar en una casa de huéspedes. En marzo de 1901 se publicaron tres nuevos trabajos de Joplin: Peacherine Rag, Augustan Club Waltz y Sunflower Slow Drag que se encuentra entre las tempranas joyas del ragtime. Siete meses después, el mismo Joplin edita otro éxito: The Easy Winners. Stark editó A Brezze from Alabama, Elite Syncopations y el conocido The Entertainer, mientras que S. Simon publicó Cleopha que fue la favorita de la banda de Sousa. En 1903 Joplin compró una casa de trece habitaciones en Lucas Avenue, un barrio distinguido. Conforme pasaba el año, las relaciones con Stark se volvieron tensas: Stark, realista y práctico, entendía que publicar los rags y hacerles propaganda era lo debido, pero Joplin aspiraba a formas más extensas, componer ballets, una ópera y quién sabe si una sinfonía. Los rags de 1903 tienen un fuerte componente cantábile, el rítmico Something Doing incluye un melodioso segundo sujeto y el trío de Weeping Willow no es tan vigoroso como en otros rags, sino que se muestra como una cantinela.
En 1904, St.Louis celebró la Feria Mundial. The Cascades es una partitura descriptiva, basada en el llamativo curso de las fuentes, lagos y cascadas que constituían la atracción de la feria; una pieza de virtuoso, con sus ondulaciones sobre un contagioso swing. The Sycamore se caracteriza por una línea de bajo libre, con respuestas contrapuntísticas de la mano derecha. En cuanto a The Chrysanthemum, es el primer rag de Joplin en utilizar un trío personal de singular delicadeza, elegantemente sincopado y con la advertencia de que se interprete con dulzura.
En 1905 se publicó el rag Leola, en el que aparece por primera vez el aviso: ¡Advertencia! No debe interpretarse esta pieza de forma apresurada. Nunca es correcto tocar el ragtime con rapidez. El autor. La advertencia de Joplin va dirigida a todos aquellos virtuosos que arruinaban y aún hoy destrozan con su precipitación unos rags muy ricos en matices. En este año aparecieron las tensiones en el hogar de Joplin; tuvieron una hija que falleció pocos meses después y, según comentó un conocido. su mujer no estaba interesada en la actividad musical. Simpáticos y amables con sus amigos, eran en cambio malhumorados entre ellos, aunque en público se mostraran corteses. Finalmente se separaron.
En 1906 Joplin fue a Chicago, entre otros motivos para ver a su joven amigo Chauvin que estaba muy enfermo (fumaba opio y padecía síntomas terminales de sífilis). En sus últimos tiempos Chauvin componía ragtimes. Ya tenía dos temas, cuando Joplin completó otros dos. El fruto de este encuentro fue una de las piezas maestras de la literatura del ragtime: Heliotrope Bouquet, en palabras de John Stark la audible poesía del movimiento. Gladiolus Rag es otro de los rags de Joplin de mayor éxito; llama la atención por un desarrollo melódico muy libre, lo cual es difícil en un género que pide uniformidad de tiempo y medida.
En 1907, viendo que el ragtime precisaba una atención personal de tipo misionero, se embarcó en una serie de giras. En New York conoció a Lottile Stokes y se casaron, estableciéndose en aquella fórmula de casa-pensión-conservatorio, que parecía ser su hábitat natural. Los rags que compuso en aquel momento contienen íntimas y tiernas impresiones y emociones: En Wall Street Rag narra lo que parece imposible, tanto más en un ragtime, el ambiente entre los corredores de bolsa, mientras que en su serenata–tango Solace despliega un ardor y melancolía de elevado refinamiento.
En 1908 editó él mismo seis ejercicios de ragtaime, bajo el título The School of Ragtime. La pedagogía de Joplin era honesta en su acercamiento al alumno, rechazando las concesiones y los eslóganes populares del tipo “Aprenda el ragtime en diez lecciones”. Redactó el prefacio de sus ejercicios con claridad: El auténtico ragtime de altura es difícil de interpretar. Una dolorosa realidad que muchos pianistas han descubierto. Las síncopas no avisan con antelación. Este mismo año aparecieron tres nuevos ragtimes Fig Leaf, Sugar Cane y Pine Apple Rag, todos ellos con interesantes hallazgos. Otros rags a tener en cuenta son el bailable Country Club, el enigmático y libre Euphonic Sounds y Parangón que recuerda las canciones de la época de las plantaciones, además de Pleassant Moments, que como Bethena, es un vals sincopado, pero más brillante y tierno.
De 1910 es su Stoptime Rag, característico por su torbellino de alegría contenida y sus stamps de pie en el suelo escritos en la partitura; es una partitura jocosa, compuesta por alguien al que nunca se le sorprendia sonriendo, según observó John Stark. Este mismo año sigue concentrado en la composición de una ópera a la que daría el nombre de Treemonisha. Para ello había comprado un ejemplar del Manual del simple, doble y triple contrapunto en una edición de Jadassohn de 1891. Poco después de su muerte, Stark publicó Magnetic Rag que cubre una gama poco usual de estados anímicos y muestra una máxima capacidad de agrandamiento dentro de la forma breve, de carácter profundo algo impresionista.
1911 fue testigo del gran éxito musical Alexander´s Ragtime Band, compuesta por el joven Irving Berlin. Este éxito pone de manifiesto la preferencia del público por los pseudorrags frente a los rags clásicos: composiciones más fáciles de tatarear, de tocar y por lo tanto más vendibles. Será el declive del rag tradicional. En mayo, la partitura de la ópera Treemonisha fue rechazada por todos los editores y entonces Joplin la imprimió a sus expensas. Con todos sus defectos, es un compendio admirable de hermosa música afro-americana, auténtica y pura. El argumento, de cierta ingenuidad filosófica, trata de de una niña abandonada, encontrada bajo un árbol, adoptada y educada, combate conjuros y escapa a un complot de asesinato, se convierte en caudillo de su pueblo al que conduce hacia la libertad y la igualdad por medio de la educación.
Pese a su temperamento poco variable, empezó a mostrar extremados cambios de humor: De manera inexplicable se hundía en un total abatimiento, oscuras depresiones, que alternaba con períodos de energía y concentración. En 1913, como muchos negros adinerados de New York, los Joplin se trasladaron a Harlem, comprando una casa en West Street. En ese momento Treemonisha era la monomanía de Joplin, revisando constantemente la obra. Incapaz de pensar en otra cosa, empezó a descuidar a sus alumnos; algunos se fueron y a otros los despidió. La situación económica era desesperada y su mujer acomodó algunas habitaciones para alquilarlas a los transeúntes.
En 1915 hubo una representación de la ópera en una sala de Harlem, que fue un fracaso. Joplin se hundió; volvió a trabajar en otras partituras, pero la inspiración se había esfumado. Creció la desorganización, depresiones más largas y profundas, la coordinación psicológica empezó a fallar. En abril de 1916, había interpretado para varios rollos de pianola de la firma Connorized, entre los que había una suave y competente versión de Maple Leaf Rag. En junio, diez meses antes de morir, registró de nuevo Maple Leaf Rag para Uni-Record Melody y el cambio era espantoso: Una versión desorganizada y penosa es la prueba arrebatadora de la rápida desintegración del músico. Ingresó en el Manhattan Hospital. Murió en 1917. La causa de la muerte, según el certificado de defunción, fue demencia paralítica-cerebral causada por la sífilis.
Disfrutamos ahora con su legado: Una música elegante, variada, a menudo sutil, contagiosa y vital. Hoy, un musicólogo americano podría referirse a los rags de Joplin como el preciso equivalente, en términos de estilo local, a los minués de Mozart, las mazurcas de Chopin o los valses de Brahms.