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De profundis de Maël Goldwaser

Norberto Torres



(Nº 44, invierno, 2023)

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DISCOGRAFÍA


Maël Goldwaser. De profundis. Autoproducción, 2020.

Desde que en 1936 el sello parisino La Boîte à Musique, con producción y mecenazgo del Marius de Zayas, editó posiblemente la primera antología del flamenco, con los toques clásicos flamencos de Ramón Montoya, la guitarra flamenca de concierto no ha dejado de ser protagonista en Francia como modalidad instrumental a solo. Entre otros nombres, cabe citar a Pedro Soler, guitarrista fecundo en el sello de world music Le Chant du Monde, tanto  en su faceta de tocaor para cante y baile, como en la de concertista, José González Rodríguez “Pepe de Almería” (Almería, 1917-Francia, años 60), también prolijo en ambas modalidades, el controvertido Ricardo Baliardo Manitas de Plata (Sète, 1921-Montpellier, 2014), una estrella internacional de la guitarra “gitana”, aupado por los artistas e intelectuales franceses en los sesenta, probablemente pionero en este singular tipo de autógrafo, escribir en la tapa de la guitarra –en su caso, una Ramírez firmada nada menos que por Picasso–, José Pisa, el granaíno José Peña (Granada, ¿?-París, 2009), principal docente y transmisor del toque clásico flamenco de Montoya y Ricardo, vía escuela granaína, desde la “Académie de Guitare”, formando a centenares de guitarristas en el toque y la cultura flamenca, entre ellos a Claude Worms, etc. 

Con ellos, hay que sumar  a la siguiente generación, nacida en los sesenta, seguidora de la estela de Paco de Lucía, Manolo Sanlúcar, Vicente Amigo, Tomatito, Gerardo Núñez o Pepe Habichuela, a Vicente Pradal, Andrés Moreno, Juan Carmona, los hermanos Sánchez, Kiko Ruiz, etc. Hoy, una nueva generación en sintonía con las guitarras punteras de Josemi Carmona, del Paquete, Diego del Morao, Dani de Morón, Rycardo Moreno, etc., está dando que hablar entre los profesionales del toque. Ellos son, entre otros, Juan El Flaco, su primo Pepe Fernández (de origen granaíno, a su vez primo de José Fermín Fernández),  Antoine Boyer, Anatole del Morao, Lidie Fuerte, Samuel Rouesnel Samuelito, Maël Goldwaser, o el belga Myrddin De Cauter.

La pertenencia a las comunidades andaluza y española del exilio o de la emigración, a las familias gitanas del Sur de Francia, o ambas identidades, suele caracterizar el perfil de este nutrido grupo de guitarristas, aunque ya encontramos afortunadamente a varios guitarristas galos rubios y pelirrubios “de pura cepa”, atraídos por la cultura del flamenco a través del toque.

Es el caso de Maël Goldwaser, alimentado de cultura española y flamenca en Toulouse, como Vicente Pradal, Kiko Ruiz, o la guitarrista ecléctica Lidie Fuerte. No en balde, esta ciudad del Suroeste de Francia acogió a gran parte del exilio artístico e intelectual republicano después de la Guerra Civil, y que su universidad tiene sin lugar a dudas una de las productividades más fecundas en torno a los estudios hispánicos1. Maël Goldwaser no solo es guitarrista, sino que además es licenciado en Filología Hispánica, musicólogo investigador, con una beca Erasmus para realizar en Barcelona el máster de flamenco de la ESMUC, con una tesina sobre la obra y teoría musical de Manolo Sanlúcar, su campo de investigación2. Un caso que refleja la formación y concepción humanística del flamenco de Manuel Muñoz Alcón, transmitidas principalmente a guitarristas procedentes de los cinco continentes con los años de  docencia que impartió en Córdoba, en el marco de su Festival de la Guitarra. Sobre ello, Maël comenta en su página web:

Indudablemente fueron las clases de Manolo Sanlúcar que me llevaron a estudiar la musicología. Mi primer encuentro con el gran maestro fue en el año 2013 en el festival de la guitarra de Córdoba. Dos años más tarde, decidí entrar en master de musicología para escribir una tesina de investigación sobre los vínculos entre la obra teórica y musical de Manolo Sanlúcar. 

Desde esta investigación sobre Manolo Sanlúcar y su afán de teorizar y poner en práctica su propuesta de intentar evolucionar el flamenco desde su propia cultura musical, Maël Goldwaser aporta su propia propuesta creativa. Un disco minimalista, como el de Pedro Barragán que hemos reseñado3, con nueve toques de solo guitarra, una portada en blanco y negro de aspecto místico, algo lúgubre, en la que el guitarrista aparece de pie como meditando, sujetando el mástil de su guitarra. Estamos en el lado opuesto de los colores alegres y sus estereotipos asociados al flamenco y Andalucía. Otra propuesta contracorriente, diferente a las producciones actuales, más inclinadas a la fórmula colectiva de colaboraciones llamativas para entrar con más efecto mediático en el mercado. Propuesta meditativa y expresiva, como la de Rafael Riqueni hoy en su proceso creativo.

Siguiendo el orden cronológico del disco, tenemos en primer lugar la petenera “Nada es eterno”. Iniciada en arpegios sobre un tempo lento a modo de preludio, rápidamente aparece el paseíllo rasgueado de la petenera para afirmar la forma que está interpretando. Evocación de la melodía del cante por petenera, aquella mujer “fatal”, perdición de los hombres, que murió de repente, y llevan a enterrar. Breve evocación de la forma bolera bailable, jugando con la dinámica para romper el tempo solemne circunstancial, y modular a la sonoridad disonante y contundente de la taranta. El ritmo se precipita inesperadamente, como una breve tormenta, para instalarse en la bulería. Solo será unos segundos de tensión rítmica, para volver a la calma y a la forma arpegiada del preludio inicial.

Como si fuera una fuga, Maël Goldwaser anuncia con un sencillo motivo melódico el principio del tema siguiente, la bulería “Palancas”. Compuesta en la tonalidad de taranta, juega a su vez con los contrastes de tensiones entre rasgueados y golpes del ritmo, y arpegios delicados, el conjunto construido en torno a la melodía anunciada al principio. Una manera original de entender la fuga pues, y sus contrapuntos.

A partir del tercer tema y hasta el séptimo, los toques dejarán de tener títulos, y solo se anuncian las formas, otro rasgo de minimalismo despojado de la producción: Colombiana, Soleá, Farruca, Granaína, Siguiriya. A pesar de iniciarlas todas de forma rítmicamente libre, a modo de preludio, Maël Goldwaser anuncia rápidamente los toques flamencos, con sus característicos paseíllos rasgueados, para desarrollar un discurso armónico contemporáneo. Basado en sugerentes juegos sobre la dinámica que le permiten las diferentes técnicas de la guitarra flamenca, añade a ello la exploración de una rica paleta sonora sobre los timbres que producen estas técnicas de contrastes.

Maël Goldwaser, como su maestro Manolo Sanlúcar, es también un pintor de sonidos interiores, los de los afectos, los del alma. Para ello, el tempo de base elegido será más bien lento, para dejar sonar los acordes con sus armónicos, y poder frasear con nitidez todas las notas de sus melodías. En este sentido, un concepto del instrumento, que le acerca al de la guitarra clásica: pulir el sonido de la guitarra y sus timbres como un orfebre.  

La forma rítmicamente libre de la taranta, con sus disonancias de cuerdas al aire, será la idónea para poner en valor este trabajo sobre el sonido. Titulada “De profundis”, sonará inconfundiblemente a Levante, con sus intensos bajos ligados, sus silencios a modo de eco, su trémolo buscando la salida al exterior. Y una sobrecogedora copla al final, usando una técnica especial que le permite poner en diálogo dos melodías, la del trémolo y la del canto, para precipitar el final con un picado cromático descendente a modo de cadencia, tan del gusto de Sabicas. Una caída y vuelta al punto de partida, el acorde disonante tan agresivo de la tónica del toque por taranta.

El discurso contracorriente de Maël Golwaser terminará con un oxímoron, un aéreo e íntimo arpegio lento, titulado “Fin de fiesta”. La soledad sonora puede ser también una forma de compartir y acabar con el cuadro.     
 

Notas

1 De hecho, se puede considerar la tesis doctoral de Mercedes Pradal de Martín sobre la copla andaluza, defendida en dicha universidad en 1967, posiblemente como la primera tesis doctoral que trata indirectamente sobre flamenco. (Para más detalles, ver “PRADAL DE MARTÍN, Mercedes", Fondo de Música Tradicional IMF-CSIC, ed. E. Ros-Fábregas (acceso: 27 Dic 2022) [https://musicatradicional.eu/taxonomy/term/4456]

2 Más información sobre Maël Goldwaser y sus artículos sobre Manolo Sanlúcar en [www.mael-goldwaser.com]. (Consultado el 21/12/2022).

3 Barragán, Pedro (2021). Chinitas, en  Revista de Investigación sobre Flamenco “La madrugá”, Núm. 18 (2021). Diciembre.  (En línea en https://revistas.um.es/flamenco/article/view/506111]

 

Escrito por Norberto Torres
Desde España
Fecha de publicación: invierno de 2023
Artículo que vió la luz en la edición nº 44 de Sinfonía Virtual
www.sinfoniavirtual.com
ISSN 1886-9505




 

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