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Se trata de un proyecto grande, ilusionante, de ambiciosos propósitos intelectuales, atrevido en su fundamento e interesante desde el modo y la forma. Para mí, no es ni más ni menos que un propósito de “Deconstrucción” de la estética musical para ser observada y degustada a través de cristales vahados de poesía.
Un psicoanálisis literario-musical de Paco Escobar en el que aflora todos los instintos musicales reprimidos, de naturaleza flamenca y no flamenca, que se han forjado y han permanecido en su subconsciente desde los principios de su dilatada carrera como instrumentista, filólogo y docente. Y no sólo por esto, agreguemos su amplia cultura en terrenos musicales ajenos al flamenco.
Como establecen los buenos modales, el disco se disfruta al escucharlo en el orden establecido y no picoteando temas de aquí y de allá. No es música de consumo rápido como un fast-food (o quizá exista ya la denominación "fast-music"), difícil de asimilar en plataformas que no ofrecen el libreto o el enlace al mismo. Sugiero pues, sentarse a la mesa y disfrutar del menú completo. Hoy lo he vuelto a escuchar y remarco lo importante que es leer atentamente el ideario del trabajo que Paco nos relata, sólo esto ya nos predispone con impaciencia a recibir una buena amalgama de alimento musical sorprendente. Es atrevido y requiere atención para la audición, pero eso es bueno, también lo requiere Le Sacre du Printemps y lo mejor de Coltrane.
El menú se presenta estructurado y guiado en siete capítulos distinguidos con colores y con unos títulos, que lejos de ser informativos son intencionadamente evocativos, que sólo nos van a sugerir imágenes, intenciones y posibles sensaciones; y atención a las dedicatorias de cada tema porque también orientan sobre el aroma de un objetivo o quizás de algún recurso musical.
Támiris es el espíritu. El mito al cual todo músico podría adorar, el viejo héroe trovador enmudecido y desahuciado por un poder mediático que, durante siglos, elevó a la pretenciosa Euterpe a lo más alto del Olimpo. (Sotto voce) Ah... y se rumorea que Támiris pudo ser gitano, aunque algunos sostienen que negro… Sólo Zeus sabe.
Escrito por Rafael Mira
Desde España
Fecha de publicación: verano de 2022
Artículo que vió la luz en la edición nº 43 de Sinfonía Virtual
www.sinfoniavirtual.com
ISSN 1886-9505 |