Curro Lucena, Curro Lucena con la colaboración especial de Ángel Mata. Inéditos en directo. Cubaboluna, 2019. Disco compacto
Curro Lucena (Lucena -Córdoba-, 1950, Hijo Adoptivo de Ronda) es un cantaor largo, uno de los maestros del cante de la segunda mitad del siglo XX por su trayectoria, entrega, conocimiento. Desde su aprendizaje en el tablao Zambra a principios de los años setenta del pasado siglo con compañeros como Rafael Romero, Juan Varea, Pepe el Culata, Rosa Durán, Miguel Vargas, Pepe el de la Matrona, entre otros, pasando por sus actuaciones por España y el mundo cantando junto a los más grandes, como Antonio Mairena, Enrique Morente o Calixto Sánchez, obteniendo además premios como los de Mairena del Alcor, Tertulia Flamenca de Ceuta y el Festival de Cantes de las Minas de La Unión, Curro ha construido una carrera impecable.
Ha grabado más de una docena de discos, desde el primero de 1972 acompañado por la guitarra de Perico el del Lunar. Después, en otras grabaciones, ha sido acompañado por Manolo Sanlúcar, Manolo Franco o Ángel Mata, entre otros. Precisamente este último es el que hace “colaboración especial” en este trabajo que comentamos, cantes en directo con la cercanía del público. Un acompañamiento ajustado al cante, atento a las necesidades del cante y del cantaor sin dejar de mostrar su personalidad.
Esta vez es una selección, que se suma a las que últimamente nos ofrece con generosidad, con grabaciones en directo, con 12 cantes, grabados en lugares como Málaga, Granada, Lucena, Almería, Lepe (Huelva) y El Burgo (pueblo de Málaga, no Burgos, como le pasó a una famosa cantaora, que se presentó en Burgos porque lo había entendido mal). Los cantes son los siguientes: fandangos, soleá de Cádiz, bamberas, malagueña de la Trini y Chato de las Ventas, alegrías de Córdoba, cartageneras, la caña, seguiriyas, granaínas y media granaína, serranas, taranto y minera, caracoles.
Como vemos, combina estilos de varias ramas del flamenco, así como unos más usados y casi inevitables, como la soleá y la malagueña, junto a otros que se cantan menos, por desgracia, como serranas y bamberas. Todo hecho con sentido de lo clásico, del equilibrio, con sobriedad, temple, ajuste musical y conocimiento. Por destacar, hablaríamos de la soleá de Cádiz y su preciso desarrollo, la elegancia de las cartageneras (no olvidemos que fue premiado en La Unión), el magisterio y solemnidad de la caña o la granaína y media granaína.
Como dice en el folleto Manuel Martín Martín, estamos ante doce cantes “como los manojos de arte que alejados de las modas, nunca solemos dar a conocer al público (…) siempre con la veracidad del cante como protagonista, sin sustento ni adorno”, con los que Curro Lucena nos descubre “el valor del cante”. Cante clásico, en este caso además en riguroso directo, caliente, vivo.
Escrito por José Cenizo Jiménez
Desde España
Fecha de publicación: Invierno de 2020
Artículo que vió la luz en la edición nº 38 de Sinfonía Virtual
www.sinfoniavirtual.com
ISSN 1886-9505 |