 El clarinetista Carlos Casanova, junto al Valencia String Quartet, presentan en este disco, Clarinet Opera. Masterworks 01, varias adaptaciones para clarinete y cuarteto de cuerda de partituras del repertorio operístico más canónico, tanto clásico como romántico. El principal atractivo de este CD son los arreglos (originalmente para piano y clarinete) de arias operísticas -un género relativamente común en el siglo XIX-, firmados por músicos como Franz Danzi, Ivan Müller, Luigi Bassi, Donato Lovreglio y Carlo della Giacoma, a los que siguieron en el siglo XX Alamiro Giampieri, Friz Kroepsch y el magnífico Béla Kóvacs. La novedad musical más notable de este trabajo es que, en esta ocasión, los arreglos han sido a su vez transformados para cuarteto de cuerda por José Manuel Morales Sánchez.
El disco transcurre a lo largo de 65 minutos de indudable calidad, bajo la ágil digitación y oscuro colorido de Carlos Casanova, que utiliza un clarinete Oehler de 1910. La combinación del clarinete alemán, más cálido que el francés, y el acompañamiento de cuerda, ofrece una mayor contención tímbrica, enriquecida por las cuerdas y por una mayor amplitud armónica. Las obras elegidas son las siguientes:
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Fantasía sobre "La ci darem la mano" de la ópera Don Giovanni de W. A. Mozart. (Arreglo original de F. Danzi)
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Cavatina "Una voce poco fa" de Il barbiere di Siviglia de G. Rossini. (Arreglo original de Ivan Müller)
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Fantasía sobre Tosca de G. Puccini. (Arreglo original de Carlo della Giacoma)
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Fantasía sobre temas de Der Freischutz de C. M. von Weber. (Arreglo original de F. Kroepsch)
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Fantasía sobre temas de La Traviata de Verdi. (Arreglo original: D. Lovreglio y A. Giamperi)
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Fantasía sobre temas de Rigoletto. (Arreglo original de L. Bassi)
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Aria "Casta diva" de Norma. (Arreglo original de Bela Kovács)
Como comenté en una crítica discográfica anterior, dedicada a Il Clarinetto Piccolo all’Opera de Davide Bandieri, otros músicos transcribieron obras para clarinete piccolo en el siglo XIX, entre ellos el citado Luigi Bassi, que de alguna forma nos sirve para unir ambos discos, cuya audición recomendamos al oyente para comprender mejor uno y otro.
Es una prueba singular, y nada despreciable, de la influencia de la ópera en la música para clarinete. Sólo por eso el disco ya merece la pena. El contacto de los músicos con la ópera en el siglo XIX, ya sea desde el foso de la orquesta o a través de la composición, es sólo un ejemplo de la rica confluencia de géneros vocales e instrumentales en la historia de la música. El lugar donde mejor se plasma esa influencia mutua es, sin duda, el piano, que también formaba parte de los arreglos originales.
La nueva versión de Morales, sin embargo, supone una interesante aportación al repertorio discográfico, quizás imprevista por sus propios autores. Si en el citado disco de Bandieri se mantienen los arreglos para piano del siglo XIX, su sustitución aquí por el cuarteto de cuerda -pese a la aparente lejanía que supondría, prima facie, pasar de un arreglo a otro-, nos ayuda a regresar al lugar originario del que parten estas obras. Casi como si hubiésemos recuperado la orquesta de ópera en su momento más intimista, el clarinete logra erigirse ahora frente al foso del teatro y sumergirnos en el mundo de los palcos, las butacas y el público embelesado ante el espectáculo. No deja de ser interesante este regreso a la orquesta desde el piano, sin duda el instrumento más cercano a la orquesta por tantos motivos, ni que sea el clarinete, quizás el instrumento de viento (¿y de qué si no?) más parecido a la voz humana, el que haga las veces de cantante. La distinción entre lo instrumental y lo vocal, después de todo, no está tan clara.
Escrito por Daniel Martín Sáez
Desde España
Fecha de publicación: Verano de 2018
Artículo que vió la luz en la edición nº 35 de Sinfonía Virtual
www.sinfoniavirtual.com
ISSN 1886-9505
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