·En el ámbito de la guitarra a principios del siglo XX hubo un período álgido de la creatividad compositiva. Sus principales dinamizadores fueron los intérpretes Regino Sainz de la Maza y Andrés Segovia, que animaron a componer obras más amplias y ambiciosas. El CD Sonatas para guitarra (LMG 2152) nos sitúa en este momento de auténtica brillantez en la literatura guitarrística mediante cuatro sonatas de feliz inspiración. La Sonata III de 1927 fue compuesta por el mejicano Manuel M. Ponce y se caracteriza por su lenguaje romántico cercano a Chopin, las tendencias musicales parisinas de las que él participaba como alumno de Paul Dukas y la intención de satisfacer el gusto de Andrés Segovia por las sonoridades españolas. Moreno Torroba, pensando también en Segovia, escribió su Sonatina en 1925. Consta de una seguidilla manchega, un andante poético e introspectivo y una jota. Esta obra ha gozado de cierta popularidad y aparece en algunos programas de estudios. La Sonata op. 61 de 1930 del sevillano Joaquín Turina es rica en elementos andalucistas, con sus rasgueos característicos, ritmos enérgicos y elaborada armonía. Antonio José Martinez y Palacios nació en Burgos en 1902. Hoy quizás sería tan conocido como Falla si no fuera porque en 1936 fue inexplicablemente fusilado por los llamados nacionales. En su Sonata de 1933, destinada a Sainz de la Maza, exprime todos los recursos de la guitarra con ingenio y expresividad. Alvaro Rodriguez da muestras en este CD de un elevado virtuosismo, nitidez y sutileza tímbrica.
·El CD Ab licència o sens ella (LMG 2751) comprende una serie de obras en su mayor parte de Pasqual Fuentes (1721-1768). Compositor que llegó a ser Maestro de Capilla de la Catedral de Valencia, como muchos en su época sus obras son de estilo galante muy italianizante con elementos del barroco tardío. Las obras vocales son: dos villancets en valencià, un Dixit Dominus, Magi videntes y el motete Humilitate ac patientia. Tanto los solistas vocales como el coro y la orquesta, bajo la dirección de Francesc Valldecabres, se muestran competentes en su cometido. Dicho esto, debo confesar que estas obras me parecen poco imaginativas, monótonas, algo repetitivas y predecibles, y de una majestuosidad un tanto hueca, pero puedo estar equivocado. Mucho mejor me parecen las tres piezas para órgano de Manuel Narro, Rafael Anglés y Vicent Martín i Soler, interpretadas con brillantez por Daniel Rubio.
·En varias ocasiones me he lamentado de lo poco que se interpretan las composiciones del sin embargo prolífico Joan Manén (1883-1971). Una música ecléctica en el mejor sentido de la palabra, en la que no faltan leves influencias de Debussy, incluso de Wagner. No obstante, el panorama va cambiando en la actualidad, en parte por los esfuerzos de la Associació Joan Manén. Un ejemplo lo tenemos en el CD Joan Manén Collection. Diálogo, Vervedere, Trois Chansons (LMG 2153). Diálogo Op. A-44 es una conversación entre cinco instrumentos: trío de cuerdas, flauta y arpa que dialogan entre sí. Resulta particularmente hermosa en la media parte, en la que adopta un tiempo más sosegado. Fue una de las últimas obras y fue estrenada en Radio Barcelona en 1958. En cambio Trois chansons Op. A-9para voz y piano es una obra temprana cercana a la estética de la música francesa con letra del poeta Maurice Chassang y que debió ser compuesta hacia 1903, así como la descriptiva y evocadora Chant de Pâques Op. 15 para voz recitada y piano. La delicada y ensoñadora Introducción del segundo acto de la ópera Don Joan Op. A-35 ha sido transcrita para flauta y piano por Daniel Blanch, pianista y presidente de l´Associació Joan Manén. Belvedere Op. A-40 es una suite en cuatro movimientos concebida en 1951, inicialmente escrita para flauta y orquesta de cuerda, que el mismo Manén arregló para flauta y piano. El impecable elenco de intérpretes de este disco está formado por Elisabet Franch, flauta; Daniel Blanch, piano; Helena Satué, violín; Aida Carmen Soanea, viola; Romain Garioud, violonchelo; José Antonio Domené, arpa; Júlia Farrés Llongueras, soprano.
·Es de agradecer que el sello la Mà de Guido nos haya brindado la oportunidad de conocer la obra de un compositor tan poco conocido como delicado y exquisito: Josep Martí i Cristià (1884-1918), a través del CD Somni d´un poeta (LMG 2156). Nacido en Linars del Vallès en el seno de una familia acomodada, ya desde niño mostró una notable predisposición para el piano, estudiando más tarde con Enric Granados y armonía y composición con Felip Pedrell. Sabemos muy poco de su corta vida. Además de la composición y de la enseñanza, dedicaba tiempo a la pintura, a la poesía, a la escultura y a la natación. El disco reúne 25 piezas pianísticas, casi todas breves, en las que en tres se añade una soprano, en una el violín y en otra el violín y el violoncelo. El lenguaje es tardorromántico, encuadrado en el Modernismo, mucho más introspectivo y nostálgico que extravertido, con armonías y modulaciones que lo acercan al impresionismo sin llegar a penetrar en él. El pianista Daniel Blanch se nos muestra como siempre inspirado y un genial del traductor del pensamiento del compositor. A ello se suman la bella voz de la soprano Júlia Farrés-Llongueras, así como los competentes Kalina Macuta al violín y Guillaume Terrail al violoncelo.
·José Galeote es el compositor del CD Poniente (AH252), subtitulado como Música de cámara con guitarra, pues también intervienen un violín, un violoncelo, una flauta y un piano. Nacido en Barcelona en 1978, ha sido alumno del guitarrista y compositor Jaume Torrent. Sus "Cinc estudis evocants" han sido incluidos en el programa de guitarra del Conservatorio del Liceo. Ha sido invitado en varias ocasiones como ponente tanto en ESMUC (Escuela Superior de Música de Cataluña) dando charlas sobre la simbiosis entre intérprete y compositor en el proceso creativo, y la UAB (Universidad Autónoma de Barcelona) como miembro integrante del proyecto cultural Bacchanalia. En la actualidad es profesor de Guitarra en la AIMB (Academia Internacional de Música de Barcelona) dirigida por Melani Mestre y profesor de Música de Cámara y jefe del Departamento de Guitarra en la Escuela Pia de Sabadell. El disco agrupa Dues peces breus, Deux pièces Parisiennes, Sonatina primaveral, Sonatina estival, Sonatina otoñal, Sonatina invernal y Dos nocturnos. Su música es difícil de definir. A menudo, tras un fragmento romántico e intimista, su discurso se torna inquietante, interrogativo, incluso en ocasiones obstinado, otras desolado, utilizando un lenguaje contemporáneo. En estos contrastes radica el interés de estas composiciones resultantes de la contemplación y de una ensoñación un tanto onírica, interpretadas con una técnica nítida impecable.
·Las grabaciones del magnífico concertista y pedagogo Miquel Farré dan testimonio en este CD de sus 30 anys de concert al Centre Cultural Terrasa (LMG 2155) con un repertorio virtuosístico que en sus manos se convierte en inolvidable. El disco se inicia con el Nocturno Op.48 Num.1, el Andante Spianato i Gran Polonesa Brillante Op. 22, de Chopin; le siguen las poliédricas Variaciones sobre un tema de Chopin, de Mompou, toda un ejercicio de deconstrucción de las estructuras sedimentadas en el elemento discursivo del compositor polaco; los sinuosos y fugaces Jeux d´eau de Ravel; el arriesgado e imponente Allegro de concierto, los delicados Valses poéticos y la exultante Rapsodia aragonesa, de Granados. Xavier Montsalvatge diría de Miquel Farré:
Siempre consigue suscitar la impresión de que nos encontramos delante de un verdadero concertista. Se manifiesta como tal por la fuerza y brillantez de su técnica, por la manera de interpretar cada obra a la que da su justa dimensión... músicos que saben transmitir las piezas haciendo que surja íntegro el mensaje que esconden, sin desvirtuar su estilo e, incluso, revitalizándolo.
La toma de sonido de estas grabaciones es óptima.
Escrito por Joaquim Zueras
Desde España
Fecha de publicación: Verano de 2018
Artículo que vió la luz en la edición nº 35 de Sinfonía Virtual
www.sinfoniavirtual.com
ISSN 1886-9505
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