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ÓPERA PARA TODOS (V). ROSSINI, "EL CISNE DE PESARO" (II/II): LA CENICIENTA Y GUILLERMO TELL
José Belmonte


Ópera en dos actos, con libreto de Jacopo Ferreti, basado en el de G.Ettiene para el vodevil francés “Cendrillon”, y el cuento de Perrault del mismo nombre.

Estreno: Roma, 25 de Enero  de 1817

            La Cerenentola (la Cenicienta) es una de las obras más queridas y representadas de Rossini. Como muchas otras obras del maestro, la celeridad fue una de las peculiaridades de esta ópera. En un principio, fue el cuento de Perrault la base del libreto de Ferreti, pero adaptado al argumento del vodevil “Cendrillon”.
            Uno de los cambios más significativos con respecto al cuento del escritor francés es el tema de la zapatilla. La censura en boga por aquella época en los espectáculos italianos impedían la exhibición de ciertas partes del cuerpo femenino (entre ellas las pantorrillas), de ahí el cambio de la zapatilla de cristal por un brazalete como elemento básico para que el príncipe identificara a la Cenicienta.
            Hemos hablado antes de la celeridad con que fue pergeñada la obra de Rossini. En realidad el genio de Pesaro completó su obra en veinticuatro días. Parece ser que esta prisa afecto a los ensayos del estreno, y éste tuvo algunos fallos que impidieron su éxito entre el público. Ya en posteriores representaciones, “La Cerenentola” obtuvo el reconocimiento merecido a la labor e inspiración de su compositor.
Hagamos mención de algunos de los momentos y números más significativos de esta ópera:

- “Un soave non so che”, dúo ornamentado de agilidades maravillosas por parte de los intérpretes.

- Aria “Sia quaelunque delle figlie”

- Sexteto “ Questo e un nodo avvilupatto”

- “Nacqui all´affano”

-Personajes

- Don Magnifico, padre de Clorinda y Tisbe, y padrastro de Angelina: Bajo bufo

- Don Ramiro, príncipe de Salerno: Tenor lírico

- Dandini, ayudante del príncipe: barítono

- Alidoro, consejero de Don Ramiro: Bajo

- Angelina, “La cerenentola”: Mezzosoprano

- Clorinda, hermanastra de Angelina: soprano lírica

- Tisbe, hermanastra de Angelina: Mezzosoprano

- Cortesanos
           

Argumento

Acto I (Desarrollado en dos cuadros)

- Cuadro I

            En el salón del Don Magnífico, sus dos hijas ensayan pasos de baile mientras Cenicienta prepara café. Alidoro llega disfrazado de vagabundo. Ante el rechazo de las dos hermanas, la dulce Angelina se apiada del desconocido y le ofrece de beber, a lo que Alidoro le vaticina una recompensa del cielo ante su buena acción.
            Mientras las dos hermanas imprecan y castigan a Cenicienta por darle café al vagabundo, unos cortesanos que han llegado les invitan por expreso deseo del príncipe Don Ramiro a  la fiesta que tendrá lugar en el palacio, y donde  éste elegirá esposa.
            Las dos hermanas se vuelven locas con la noticia, y exigen a Cenicienta que les ayude a acicalarse rápido. Su  padre comienza a planear cómo rehará su hacienda empobrecida cuando se convierta en  padre de una princesa. Sus dos hijas, con malos modos, exigen a Angelina que las ayude a arreglarse para la fiesta.
            Cuando todos se han marchado, entra en escena el príncipe Ramiro. Su criado Alidoro le ha hablado de una muchacha encantadora y de buen corazón que ha encontrado en aquella casa, y quiere conocerla.
            Don Ramiro se hace pasar por su  sirviente Dandini para poder ir de incógnito. Al ver a Clorinda, quedan enamorados uno del otro al instante. Don Magnífico le pregunta sobre la fiesta que dará el príncipe cuando entra Dandini, quien ha intercambiado su personalidad con Don Ramiro, y hace oficial la invitación a la fiesta para las dos hijas de Magnifico.
            Clorinda no recibe permiso de su padrastro para ir a la fiesta y esto le entristece, cuando aparece Alidoro con los libros de la ciudad. En ellos aparece claramente indicado que Cenicienta es hija, que no hijastra, de Don Magnifico, y por ello hermana de sus otras dos hijas. El padre niega tal cosa aduciendo que esa hija murió hace tiempo, aunque no aparezca escrito en los libros.
            Más tarde, cuando Angelina ha quedado sola mientras todos se han ido a la fiesta, vuelve a aparecer Alidoro disfrazado una vez más de pordiosero y convence a la muchacha a la fiesta.
           
- Cuadro II

            En el palacio de Don Ramiro, asistimos al nombramiento de Don Magnifico. Dandini ha decidido darle la responsabilidad de ser cantinero real, siempre y cuado supere algunas pruebas. Mientras esto ocurre, Don Ramiro comprueba cómo el comportamiento de las hijas de aquél es el de dos personas mezquinas y que ninguna de las dos le valdrán para ser su princesa.

- Cuadro III

            Tras el nombramiento del nuevo cantinero real, Dandini y Don Ramiro comentan entre sí el carácter vanidoso e insolente  de las dos hermanas, hijas de Don Magnífico. Cuando las mujeres llegan, Don Ramiro les comenta que, al no poder casarse con ambas, la que no resulte escogida por él será la esposa de su escudero. Las mujeres rechazan este punto.
            Entra Alidoro acompañado de una bella  desconocida que oculta su rostro con un velo. Todos quedan asombrados ante el parecido que el rostro de esta enigmática dama parece tener con el de Cenicienta.

Acto II (Desarrollado en tres cuadros)

- Cuadro I

            Don Magnífico les recuerda a sus hijas que la escogida por el príncipe no ha de olvidar a su padre cuando ocupe el trono junto con su real esposa. Por otro lado desconfía de la misteriosa dama, sospecha de la que le tranquilizan sus propias hijas.
            Don Ramiro, que no sabe que la desconocida es Cenicienta la contempla mientras esta conversa con Dandini, que está perdidamente enamorado de ella. Angelina, creyendo aún que se trata del mismo príncipe, le confiesa que de quien ella está enamorada es de su ayudante.
            Una vez sabido esto, el verdadero Don Ramiro queda a solas con la joven. Angelina le somete a una prueba: le da su brazalete y le conmina a que, si la ama de verdad, la busque ayudado por ese brazalete. Cuando la joven se marcha, Alidoro aconseja a l príncipe que siga los dictados de su corazón. Perdidamente enamorado de Cenicienta, Don Ramiro emprende la búsqueda.
            Don Magnífico, enterado al fin del engaño, y sabiendo que Dandini y el príncipe han intercambiado sus identidades, rabia de furia, exigiendo al verdadero Don Ramiro que escoja por fin a una de sus hijas por esposa.

- Cuadro II

            Cenicienta aparece junto a la chimenea de la casa de Don Magnífico cantando una balada. Las hermanas junto a su propio padre se enojan con Angelina solo por su parecido con la desconocida que irrumpió en la fiesta. Fuera, mientras estalla una tormenta, vuelva una carroza y aparecen Don Ramiro y Dandi ni, que ya no ocultan sus verdaderas identidades. El príncipe pide hospitalidad mientras preparan una nueva carroza. Cuando Don Magnífico manda a Cenicienta traer un asiento para Don Ramiro, éste ve el otro brazalete que lleva Angelina en la muñeca. Cuando la reconoce, le impide retirarse y anuncia a la concurrencia que ella será su esposa. Don Magnífico y sus hijas se enfurecen, ante el enfado del príncipe. La misma Cenicienta intercede ante su desagradecida “familia”, y Alidoro  aconseja al padre e hijas que pidan perdón y guarden prudencia.

- Cuadro III

            En el salón del trono los cortesanos cantan al triunfo de la bondad sobre el orgullo mientras Angelina pide al príncipe Don Ramiro  que se perdone a su familia.              

***

Guillaume Tell  (Guillermo Tell.)

 

Ópera en cuatro  actos, con libreto de Etienne de Jouy e Hippolyte Louis ;Florent Bis, basado en el drama de Shiller.

Estreno: Paris, 3 de Agosto de 1829

Esta obra es una de las más largas del repertorio operístico. Con ella, Rossini nos lega su última obra escénica, y también rubrica el nacimiento de la “grand opera” francesa. Podría decirse que en “Guillermo Tell” se da una síntesis de características italianas y francesas sin perder, claro está, el sello rossiniano que llevan impreso todas las obras del maestro de Pesaro.
Su excepcionalidad como ópera lo podemos argumentar en hechos tales como el conocimiento del idioma francés por parte de Rossini, lo que hace que su musicalidad sea “inaudita” en ocasiones (máxime teniendo en cuenta el hecho de que el compositor no es francés). Por otro lado, el tratamiento de la obra como un conjunto, el carácter colectivo que emana de toda la ópera en sí ha hecho  que algunos la hayan comparado con otra obra maestra: “Boris Godunov”. Realmente, lo endeble de su libreto, que  va en detrimento de la calidad teatral, no es óbice para que la música de “Guillaume Tell” sea una obra maestra. Esta maestría melódica, junto a su extensión, hace que no sea posible cercenar ninguno de sus números sin atentar contra ella, lo que hace realmente complicada su representación.
 
Entre los números a destacar de esta obra maestra mencionemos:

- El aria “Sombre foret”

- El coro “Hymenee”

- El aria “Sois immobile”
           
- La séneca de Arnold “Asile hereditaire”

- El coro “Toi que l´oiseau”


-Personajes

            - Guillaume Tell, patriota suizo: Barítono

- Arnold Melcthal, patriota suizo: tenor spinto

- Mathilde, hermana de Gesler y princesa de Habsburgo: soprano lírica.

- Jemmy, hijo de Guillaume: soprano ligera.

- Gesler, gobernador de los cantones de Schuzz y Uri: Bajo

- Walter Furst, otro patriota suizo: Bajo

- Melcthal, padre de Arnold: Bajo

- Rouodi, pescador: Tenor

- Hedwige, esposa de Guillaume: mezzosoprano
           
- Rodolphe, capitán de los arqueros de Gesler: Tenor lírico
           
- Leuthold, pastor: Barítono

- Cazados: Barítono

           
Argumento

Acto I

            Junto al lago de Lucerna, campesinos y pescadores hacen los preparativos para la feria del ganado que tendrá lugar ese mismo día. Allí están Guillaume y su familia, el patriota Melcthal , y su hijo Arnold, que, a pesar de que está ya fijado su matrimonio con una joven doncella suiza,  está enamorado de Matilde, a la que salvó de morir ahogada en ese mismo lago. Por ello se ha pasado al bando austriaco, enemigo de los suizos.
            Guillaume. Amigo de Arnold, intenta convencerle para que vuelva al lado de sus compatriotas. Antes de que Melcthal pueda bendecir a las parejas de novios aparece el pastor Leuthold, perseguido por soldados austriacos. Acaba de salvar a una joven de ser violada por uno de ellos, y ha tenido que matarlo. Solo puede escapar si atraviesa el lago. Guillaume es el único que se ofrece para llevarlo con su barca
            Llega Rodolphe capitaneando a sus arqueros y pregunta por el paradero del pastor, pero nadie responde a pesar de sus amenazas. En consecuencia toma prisionero al anciano patriota Melcthal.

Acto II

            Unos cazadores austriacos, entre los que se encuentra Mathilde, da una batida de caza por una pradera cercana al lago de Lucerna. La muchacha se queda rezagada deliberadamente, cree haber visto a Arnold y quiere hablarle. Cuando éste aparece, ambos jóvenes se declaran su amor y deciden casarse al día siguiente en una antigua capilla.
            Al oír que alguien se aproxima, Mathilde decide marcharse. Guillaume y Walter aparecen para pedirle a Arnold que recapacite y vuelva para apoyar la causa suiza. Este se niega en principio, pero al saber que su anciano padre ha muerto torturado, decide vengarse y no celebrar el matrimonio con Mathilde. Los tres patriotas se conjuran para liberar a Suiza o morir en el intento.

 

Acto III (Dividido en dos cuadros)

           
- Cuadro I

            En las ruinas de una vieja capilla, Arnold confiesa a Mathilde sus intenciones. Ya no se casará con ella, pues  debe vengar la muerte de su padre  y se ha juramentado salvar a su patria de la opresión austriaca. Ella le ruega que huya, pues Gesler piensa celebrar el aniversario de la dominación austriaca.
           
- Cuadro II

            En la plaza de Alrford, todo está preparado para la gran fiesta. Hay una gran vara en cuyo extremo luce el sobrero de Gesler. Todos habrán de pasar bajo el e inclinarse en señal de respeto. Este pronuncia un discurso en el que se burla del carácter suizo mientras sus hombres se burlan de los hombres del lugar y hacen bailar a sus mujeres.
            Guillaume y su hijo, que se han acercado a la plaza, evita  pasar bajo el sombrero para no hacer el saludo. Ropdolphe se da cuenta de ello y avisa a Gesler de que Guillaume fue el que ayudó a escapar al pastor Leuthold.
            Gesler se enfurece por esto y decide castigar a Guillaume por su insolencia y altivez. Le ordena atravesar con una de sus flechas una manzana colocada sobre la cabeza de su hijo. Cuando el patriota consigue la proeza, Gesler se apercibe de que Guillaume llevaba otra flecha. Cuando el tirano le pregunta el motivo por el que llevaba otra saeta, el patriota le confiesa que esa flecha estaba destinada al corazón de Gesler en el caso de que hubiera fallado la prueba y matado a su hijo. Al oír esto, Gesler ordena que encadenen a ambos, padre e hijo. Aparece Mathilde, hermana de Gesler. Al enterarse de lo sucedido, pide a su hermano que deje a su lado al hijo de Tell. El tirano accede, no de buen grado, y ordena llevar al arquero a su castillo, donde será ejecutado.

Acto IV (Dividido en dos cuadros)

- Cuadro I

            En la casa de su padre, el patriota Melcthal, Arnold se apresta para el combate. Llega un grupo de patriotas y le cuentan del arresto y futura ejecución de Guillaume. Todos deciden ir al castillo a liberar a su amigo.

- Cuadro II

            Hedwige, esposa de Guillaume, se encamina hacia el castillo con la intención de morir junto a su esposo cuando aparecen Mathilde y Jemmy. La princesa elogia la valentía suiza y consuela a la esposa del arquero. Aquella ha decidido entregarse como rehén a los suizos, para así conseguir la liberación de Guillaume.
            Aparece el pastor Leuthold con la noticia de que el patriota ha conseguido escapar. Al ser el único capaz de pilotar el barco en el que lo llevaban, fue liberado de sus cadenas para que pudiera gobernar la embarcación, momento en el que logró escapar. Dicho esto aparece el patriota seguido de Gesler. Guilaume da muerte al tirano clavando una flecha en su corazón.
            Llegan Arnold y el resto de los suizos y entregan a Guillaume la bandera del castillo de Altdorf. El arquero y su esposa entonan un canto a la libertad mientras Arnold y Mathilde se abrazan.

                                                                                                           




Escrito por José Belmonte
Desde España
Fecha de publicación: Abril de 2010.
Artículo que vió la luz en la revista nº 0015 de Sinfonía Virtual

 
 

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